La voz de la parroquia

El balcón corrido y el alicatado de la fachada fueron
 característicos del momento.
Ha caído en mis manos una colección de hojas parroquiales de publicación semanal, que abarcan el periodo comprendido entre el 1 de enero de 1967 y el 19 de julio de 1970. Nunca he sido aficionada a este tipo de documentos, aunque en este caso haré una honrosa excepción al tratarse de El ángel del hogar, cuya última página, titulada La voz de la parroquia, escribía el sacerdote Alfonso Axpe, proporcionando información, ya fuera religiosa o profana, sobre Agudo, sus vecinos y cualquier acontecimiento relacionado con la localidad.
En general no contiene datos demasiado valiosos, aunque no deja de ser un testimonio del acontecer local durante los años finales de la década de los sesenta del pasado siglo lo que, para una población del tamaño de Agudo, no es baladí. Nos han contado que la colección original constaba de dos tomos, que reunían más de trescientos dípticos datados desde mediados del año 1965, pero el dueño tuvo la funesta ocurrencia de prestarle el primero de ellos a un conocido, poco respetuoso con la propiedad ajena, y el libro se encuentra en paradero desconocido.
En los próximos meses se irán incorporando pequeñas entradas en las que se comenten o reproduzcan detalles de esta página; a fin de facilitar el acceso etiquetaré los escritos con el mismo nombre que utilizó el autor, La voz de la parroquia. La transcripción que sigue a continuación corresponde a la hoja de 12 de abril de 1970 y se ha elegido por dos razones; porque el tema, la bendición de una casa, me resulta insólito y porque los propietarios formaron parte de mi entorno más próximo.

BENDICIÓN DE UNA NUEVA CASA.— El día 1 de Abril tuve la satisfación de bendecir una nueva casa en Agudo, propiedad de mis buenos amigos Pepe Pellejero (hijo de mi buen amigo Sacristán) y Mª de los Ángeles Bolaños. Bonita y moderna casa, con un amplio “Despacho de Piensos Compuestos” situada en lo más céntrico de Agudo: calle Cervantes, 46. Felicitamos a este excelente matrimonio y le deseamos mucha suerte en su negocio y felicidad en su nueva y elegante casa.